sábado, noviembre 28, 2015

DELIA LARIOS: FOTOS Y BREVE SEMBLANZA PROFESIONAL

Delia Larios (Delia Elisa Larios y Orozco, 1928-2013)


Nació el 18 de mayo de 1928 en Ciudad de México. Está considerada como la primera mujer en dibujar historietas en México. Colaboró con la editorial de José G. Cruz a principios de los años 50, donde se dedicó principalmente a la nueva versión de Adelita y las guerrillas, clásico del mismo Cruz publicado por entregas en la revista Paquín durante los años 30 y 40. Participó también en La familia Burrón, de Gabriel Vargas, y desde 1963 fue responsable de la serie Joyas de la mitología (Ediciones Recreativas/ Editorial Novaro) para la cual también dibujó diversos números que destacaban por su estilo cuidado y dulce. En 1973 abandona el país para residir en Canadá, donde dibuja para distintas publicaciones de Estados Unidos. Vuelve a México alrededor de 1981 y decide abandonar la historieta para criar a sus dos hijos. A finales de los años 80 se dedicó a la enseñanza del dibujo y la pintura en Reynosa, Tamaulipas, donde también trabajó en la SHCP (Secretaría de Hacienda y Crédito Público). Entre 1990-1992 se marcha a Ensenada, Baja California, donde impartió también clases de inglés. Mujer de formación autodidacta, no terminó su formación académica hasta instalarse en Reynosa (donde concluyó Primaria y Secundaria en modalidad abierta) y Ensenada (Preparatoria en modalidad abierta). Sus hijos y nietos la recuerdan como una mujer cultivada, muy disciplinada y temperamental, así como gran lectora. Continuó pintando hasta el fin de sus días. Falleció el 15 de octubre de 2013 en Ensenada. Jamás tuvo televisor.

Fotos tomadas por José G. Cruz a principios de la década de los 50. Cortesía de Griselda Cruz.
Fuentes de información: Griselda Cruz y Astrid Rayón Bedolla, nieta de Delia Larios.

viernes, noviembre 27, 2015

CIN3MÁTICO 47: ANDREI TARKOVSKI (PARTE 3 DE 3): NOSTALGIA

Nostalgia (1983) es, hasta cierto punto, una advertencia de futuro en la vida del propio Tarkovski, pues él mismo, como el poeta exiliado en Italia, abandonaría su propio país para no volver. Ambos morirían lejos del hogar, aunque el cineasta se volvería un ser itinerante que vaga por Europa antes del fin. 

CIN3MÁTICO 47: ANDREI TARKOVSKI (PARTE 2 DE 3): STALKER

Stalker (1979) es una nueva reflexión sobre la existencia del ser humano, y para ello de nuevo recurre a cierto universo distópico y a la simbología. Desde el punto de vista de la construcción es su filme más lineal, y sin duda el más sucio de toda su trayectoria. Tres viajeros parten en busca de la habitación de los deseos, y cada uno de ellos encarna cada una de las vías del conocimiento: la fe en el stalker o guía, la científica en el profesor y la artística en el escritor. Cada uno de ellos está reducido al símbolo, a la metáfora,  por ello mismo se tratan por sus oficios, que no sus nombres. 

CIN3MÁTICO 47: ANDREI TARKOVSKI (PARTE 1 DE 3): SOLARIS

Iconoclasta, anticomercial, único, la exigua cinematografía de Tarkovski sigue siendo hoy de gran trascendencia e influye en nuevas generaciones. Se declaraba fan de Bresson, Buñuel, Bergman y Kurosawa, con quienes parece tener poco en común. Se mantuvo al margen del cine comercial, como creador y espectador, y tampoco siguió los lineamientos de la Unión Soviética, con cuyo politburó tuvo no pocos problemas, lo que le obligó a emigrar. Toda su obra es un canto al amor, así como Solaris es la negación de la felicidad por la ciencia y la imposibilidad de la certidumbre.